Bloques, Negros y de Otros Tipos

Categories:
Localizations:

“Como observó una madre de mediana edad mientras lxs miembrxs del Black Bloc de Quebec se abrazaban antes de ir a luchar contra la policía, ‘Siempre pensé que esto iba a ser siniestro, pero estxs son solo niñxs valientes’”.

Para una explicación más detallada sobre cómo vestirse para el anonimato, consulte Consejos de Moda para Valientes

Material

  • Ropa a juego que oculte la identidad del usuario.
  • Confianza y comunicación
  • Una misión

Material Opcional

  • Provisiones: agua (en abundancia, especialmente si vas a estar vestido con ropa de abrigo o si esperas ataques con armas químicas), comida (no confíes en las tiendas o tenderxs en las zonas de conflicto), etc.
  • Camuflaje: diferentes capas de ropa para diferentes propósitos o momentos de la acción.
  • Equipo defensivo: pancartas, escudos (a ser posible camufladxs como marionetas o carteles), zapatos con punta de acero (¡siempre que sean cómodos para correr!), protecciones para el cuerpo blindadas o acolchadas, máscaras antigás o gafas y bandanas empapadas en zumo de limón (guárdalas en bolsas con cierre hermético hasta que sean necesarias), impermeables o equipo de protección química (si existe riesgo de ataque químico), cualquier material médico relevante que sepas cómo utilizar, etc.
  • Equipo ofensivo: pintura en spray, proyectiles, tirachinas, letreros o banderas en palos gruesos (o simplemente palos), cócteles molotov, luces brillantes (para entorpecer la visión de la policía o las cámaras durante las acciones nocturnas), escaleras y/o cortadores de pernos para escalar o romper barreras etc.
  • Equipo de comunicaciones: radios de mano, teléfonos móviles, escáneres policiales, banderas, tambores, códigos para comunicaros internamente.
  • Transporte: bicicletas, suficiente cambio para el ticket del metro, llaves de vuestro todoterreno (¡tranquilxs, campeonxs, era solo una broma!)

Acción

¿Qué es un bloque? ¿Existen otros tipos además del Black Bloc?

Es posible que hayáis oído hablar del famoso Black Bloc o Bloque Negro, una venerable, por no decir vieja, tradición anarquista, por la que un grupo de entusiastas de la acción directa se reúne, todxs vestidxs con ropa y máscaras negras, y participa en un determinado tipo de actividades de confrontación. Esta táctica ha cosechado importantes victorias en las últimas dos décadas y también ha fracasado más veces de las que nadie pueda contar. Las características culturales específicas asociadas hoy en día a la táctica del Black Bloc, pueden hacer que sea fácil pasar por alto su larga historia y la gran variedad de usos que se le puede dar. El Boston Tea Party, sin ir más lejos, fue un perfecto ejemplo de un Bloque en acción: lxs participantes se organizaron en secreto, vestían disfraces a juego (aunque su elección de disfrazarse de “indixs” no fue precisamente políticamente correcta), y participó en un acto provocativo de destrucción masiva de la propiedad; probablemente, su estrategia de comunicación y defensa mutua no eran muy diferentes de las utilizadas por lxs famosxs Black Blocs que, un par de cientos de años después, atacaron en Seattle a compañías cafeteras igual de nocivas. Quienes practican la acción directa harían bien en tener en cuenta la amplia variedad de escenarios en los que alguna variante de los enfoques del Bloque puede resultar útil.

¿Para qué sirve un Bloque?

Actuar en un Bloque es especialmente útil cuando lxs participantes en la acción esperan que la policía, lxs fascistas u otrxs adversarixs, van a querer identificarlxs—es decir, en la actualidad, muy a menudo. Cuando todxs en un grupo tienen el mismo aspecto, es difícil distinguir a lxs individuxs. Muchas actividades militantes es mejor realizarlas sin llamar mucho la atención, pero hay ocasiones en las que es necesario sobrepasar los límites en público. La táctica del Bloque es mejor para condiciones en las que la acción ocupa el área gris entre acción pública y encubierta, y como tal debe utilizarse con cuidado: si participáis con un Bloque en una acción totalmente legal, podéis convertiros a vosotrxs mismxs en objetivo o asustar innecesariamente a lxs transeúntes. Por otro lado, si tenéis la intención de participar en una actividad marcadamente ilegal, quizás sea mejor hacerlo fuera del formato tradicional del Bloque, en un grupo totalmente cerrado, usando el elemento sorpresa y demás. No es una coincidencia que la gente no libere animales de las fábricas de pieles en Black Blocs (aunque ocurrió una vez en Brasil).

Uno de los aspectos positivos de la actividad pública del Bloque es que, a diferencia de la actividad totalmente clandestina, puede crear situaciones abiertas, en las que las acciones de unxs pocxs pueden invitar a que otrxs se unan a ellas. En el mejor de los casos, las acciones militantes solo por invitación son un deporte para espectadorxs; un Bloque, en cambio, puede ser una experiencia radicalizadora participativa y contagiosa.

La forma más obvia de facilitar la participación es organizar un bloque abierto o semiabierto. En un Bloque abierto, se hace un llamamiento general para que todxs lxs interesadxs se reúnan y actúen en él; se llevan a cabo asambleas abiertas para discutir metas, estrategias, etc. El beneficio de este enfoque es que se puede involucrar a más personas; el inconveniente obvio es que la seguridad está tan comprometida que las posibilidades de acción se vuelven muy limitadas. En un Bloque semiabierto, la organización se lleva a cabo en secreto, entre personas que se conocen y que confían las unas en las otras, pero cuando el Bloque mismo se reúne, otrxs, vestidxs como el Bloque, son bienvenidxs; en los últimos años este ha sido el formato más frecuente en las acciones del Black Bloc. En estos bloques, todavía es necesario que lxs participantes estén preparadxs para lidiar con la infiltración de la policía, pero al menos cuentan con el beneficio de una planificación segura y de disponer de una estructura interna. En un Bloque completamente cerrado, lxs participantes se preparan en secreto y no permiten la participación o compañía de ningún/a extrañx durante la acción. Incluso cuando se requiere un Bloque de este tipo, puede ser valioso actuar públicamente como Bloque, en lugar de hacerlo de manera encubierta: la naturaleza pública de la acción puede enviar un mensaje importante, otrxs fuera del bloque pueden sentirse inspiradxs a participar en acciones similares. Por sí sola, la protección que ofrece la multitud podría permitir una vía de escape que sería más difícil de encontrar para aquellxs que optan por un enfoque clandestino.

Hay muchas razones para actuar como Bloque. La participación en él puede ser estimulante y buena para elevar la moral—actuar con un grupo de personas que están ostensiblemente preparadas para hacer lo que creen que es correcto, independientemente de la intimidación policial, empodera mucho más que cantar débiles consignas junto a lxs liberales y vestirse igual para la batalla es un ritual para inspirar valor al que no debemos renunciar en favor de nuestrxs enemigxs uniformadxs. La presencia de un bloque puede transmitir información importante: a los poderes fácticos, no te metas con esta marcha, o no te atrevas a amañar ese jurado; a aliadxs o posibles aliadxs, no desesperes, estamos contigo. Finalmente, el anonimato: existen innumerables razones para ocultar vuestra identidad en acciones masivas. Incluso si no planeáis cometer ningún delito, incluso si no os importa que el servicio secreto capture vuestra imagen para sus archivos, todavía hacéis un gran servicio a lxs demás al enmascararos y aumentar el número de personas que visten igual, haciendo que, de esta manera, sea más difícil para la policía teneros controladxs a todxs. Es posible que esxs otrxs tampoco sean simples delincuentes; pueden ser extranjerxs que no quieren que su participación en actividades radicales se utilice como motivo de deportación, o profesorxs que no quieren arriesgarse a perder sus trabajos. En algunas ocasiones, una multitud enmascarada intimida innecesariamente al público; en otras, en las que pocas personas se enmascaran, o la atención de la policía está demasiado centrada en el Bloque, podéis considerar más seguro no llamar la atención sobre vosotrxs mismxs haciéndolo, incluso si vais a participar en actividades ilegales; y a veces es mejor mostrarles a vuestrxs vecinxs cuál es vuestra posición, o dejar que el público y las cámaras vean que no todxs lxs involucradxs en actividades radicales son jóvenes, blancos y hombres. Por lo demás, si otrxs se han enmascarado, también podéis hacer lo mismo.

De todos modos, esas máscaras no tienen por qué ser necesariamente pasamontañas negros; hay muchas maneras, más divertidas y familiares, de ocultar vuestra identidad. Más allá del Black Bloc, se abren infinitas posibilidades: Bloques rosas, Bloques de payasxs, Bloques de médicxs, Bloques de trabajadorxs de mantenimiento … Dondequiera que haya un grupo de personas con ropa o disfraces idénticxs, la táctica del Bloque podría implementarse utilizando la multitud correspondiente para camuflarse. Halloween, por ejemplo, podría ofrecer una gran oportunidad para una acción del Bloque, ¡al igual que una graduación de la escuela secundaria!

¿Dónde y cómo se puede aplicar la táctica del Bloque?

Las intervenciones del Black Bloc han sido un éxito en las acciones multitudinarias de las dos últimas décadas: ha habido Bloques en las protestas contra las reuniones de mafias tan despreciables como la Organización Mundial del Comercio, en actos políticos como debates entre candidatxs presidenciales, en manifestaciones contra la guerra y en marchas en solidaridad con comunidades que sufren la brutalidad policial. Dondequiera que haya una reunión multitudinaria de manifestantes, puede tener sentido desplegar o convocar a un Bloque.

En tales entornos, el Bloque puede servir para muchos propósitos. Como ya se ha mencionado, puede estar presente como simple promesa de solidaridad o como amenaza. Puede actuar como línea de defensa o distracción para otrxs activistas que realizan acciones de desobediencia civil, como encierros y bloqueos, quienes no podrán defenderse de la policía. Puede participar en la destrucción de la propiedad: esto puede tener objetivos económicos, como causar pérdidas a malvadas corporaciones, o puede tener objetivos prácticos: se puede persuadir a una ciudad de albergar cualquier evento, o trabajadorxs alienadxs (¡e incluso activistas!) pueden experimentar en primera persona que el dominio que sus opresorxs parecen tener sobre ellxs, en realidad, puede literalmente romperse. Un bloque puede intentar evitar que lxs delegadxs lleguen a una reunión no deseada, o atraparlxs dentro del sitio donde se celebra, para asegurarse de que les llega el mensaje de que sus chanchullos no son bienvenidos. Puede recuperar espacios urbanos, abriendo y protegiendo una calle o parque para que otrxs lo reinterpreten y disfruten, o desviar una marcha permitida hacia zonas no permitidas. Puede involucrar a la policía en el conflicto y, por lo tanto, interrumpir su funcionamiento habitual: una reunión celebrada en Quebec, para discutir el acuerdo del Área de Libre Comercio de las Américas, tuvo que detenerse temporalmente cuando los gases lacrimógenos, lanzados en la lucha que se desarrollaba en las calles, entraron por las rejillas de ventilación del edificio que la albergaba. Puede ofrecer la posibilidad de desafiar al poder y al control en acciones inmediatas, en lugar de con meras palabras, y así mantener el ánimo y estimular el interés de otrxs. Un Bloque podría intentar provocar disturbios a gran escala, con la esperanza de precipitar una insurrección, o podría, simplemente, crear un espectáculo para enfatizar la presencia anarquista y poner en primer plano su atractivo romántico: a pesar de las quejas liberales sobre “distanciar a la población”, los Black Bloc en Seattle y en ocasiones posteriores, hicieron tanto como cualquier publicación de propaganda para aumentar el atractivo de la acción anarquista entre la población. Como mínimo, una acción del Bloque puede ser una buena práctica para futuras acciones con objetivos mayores.

Al elegir los objetivos de un Bloque en una acción masiva, es fundamental que se tengan en cuenta las intenciones, las necesidades y los niveles de comodidad de lxs lugareñxs y del resto de personas que estarán involucradas o presentes. Ganarse la antipatía de las personas innecesariamente no solo es contraproducente, sino que pone en peligro a lxs participantes del Bloque; la policía ya es enemigo suficiente para cualquiera que infrinja la ley. Lo último que queréis hacer es poner en peligro a lxs demás con vuestras acciones—no tiréis piedras a la policía desde detrás de una multitud, no os arriesguéis a provocar ataques policiales en marchas pacíficas, sobre todo, si no planeáis quedaros para llevaros la peor parte. Si no perteneciendo a una ciudad, formáis parte de un grupo, compuesto en su mayoría por personas de fuera de la ciudad, que actuará en un barrio residencial de esta, no seáis tan arrogantes como para pensar que deberías ser vosotrxs quienes decidan qué nivel de conflicto es el más apropiado. Es mucho mejor que demostréis que respetáis las necesidades y perspectivas de lxs lugareñxs y que estáis dispuestxs a seguir su ejemplo. Puede haber casos en los que sea necesario aportar a una acción un nivel de intensidad para la que otrxs no están preparadxs, por ejemplo, si organizaciones liberales abordan una gran injusticia con gestos inútiles que no servirán para arreglar las cosas—pero es bueno asegurarse de que lxs primerxs en pagar el pato por lo que sea que ocurra seréis tú y tus compañerxs, no transeúntes inocentes.

Del mismo modo, es importante ser realista sobre lo que podéis esperar conseguir en la situación en cuestión, según vuestra experiencia, número de participantes y otros recursos. Si la población local odia la arrogancia de lxs líderes/as que se reúnen en su ciudad, pero de la misma manera desconfía de las hordas extranjeras que se han reunido allí para protestar contra ellxs, podría tener más sentido que tu objetivo sean esxs líderes en lugar de romper las ventanas de negocios en lo que lxs lugareñxs podrían percibir como un ataque de forasterxs en sus calles. Tened todo en cuenta: la capacidad de la fuerza policial, el clima político local en ese momento, cuanto se preocuparan lxs demás de lo que os pase a vosotrxs y a vuestrxs compañerxs, si las autoridades querrán esta vez daros una lección o evitaran una cobertura mediática inoportuna, si la policía intentará asegurar todo el área (en cuyo caso podéis esperar que intenten realizar arrestos masivos, si tienen efectivos suficientes) o simplemente protegerán una parte de ella (en cuyo caso pueden recurrir a tácticas de dispersión o defensa, si son superadxs en número o no se sienten segurxs). ¿Vuestra acción está destinada a salir en los medios, a quienes la presencian en directo, a quienes participan en ella o a quienes pagan las facturas? ¿Vale la pena correr el riesgo por vuestro objetivo? ¿Es apropiado para el evento en cuestión?

Actuar como Bloque en acciones multitudinarias, fuera de la protección que ofrece la masa de participantes, es una propuesta mucho más arriesgada, ya que el Bloque puede ser fácilmente rodeado y neutralizado por la policía. Históricamente, en las manifestaciones, casi todos los Bloques que se han integrado bien en un número mucho mayor de manifestantes respetuosxs de la ley, han logrado mantener cierto grado de seguridad y coherencia, mientras que, casi todos los Bloques que han intentado operar por su cuenta, han sufrido una dura represión policial, o al menos han corrido el riesgo de sufrirla. Algunas lecciones que podemos extraer de los éxitos y fracasos anteriores son:

  1. El Bloque no debe operar sin el elemento sorpresa o el beneficio de estar protegido por la multitud, a no ser que se espere que la participación en él sea muy numerosa, la moral esté muy alta y se tenga mucha experiencia defensiva, o a menos que el propósito de la acción sea conseguir que muchxs participantes sean arrestadxs.
  2. Las acciones directas (Bloques, marchas no autorizadas, etc.) en actos multitudinarios siempre deben tener lugar el día anterior al gran día de protesta general o ese mismo día, nunca después. Cuando la acción directa precede o coincide con marchas y concentraciones multitudinarias, a menudo marca el tono de todo lo que sigue, elevando la apuesta y en general radicalizando el evento; cuando lxs entusiastas de la acción directa son lxs únicxs que quedan en la calle, después de que lxs activistas respetuosxs de la ley se hayan ido a casa, la policía sabe que pueden aislarlxs, abusar de ellxs y arrestarlxs sin temor a molestar a lxs ciudadanxs “equivocadxs”, o ser vistxs por ellxs mientras lo hacen. La presencia de otras personas que pudieran ser testigos de la brutalidad policial es un importante elemento disuasorio en estas circunstancias; actuad sin él bajo vuestra responsabilidad.
  3. Con el fin de garantizar su seguridad sobre el terreno, aquellxs que operan en un Bloque deben tener el apoyo, o al menos el respeto, de algunxs, si no de la mayoría, de lxs que están fuera del Bloque, por no decir el apoyo general de la comunidad activista. En un caso histórico, un Black Bloc fue rodeado y acorralado por la policía, que se dirigía a rematarlo, cuando la marcha de una organización de mujeres liberales fue desviada para pasar por esa zona y brindar a lxs miembrxs del Bloque la oportunidad de integrarse en ella y escapar. Con este fin, es importante que las metas u objetivos del Bloque sean inmediatamente comprensibles para lxs ajenxs a él, de modo que, estén o no de acuerdo con la táctica en sí, al menos puedan entender por qué se está empleando.

Por otro lado, hay casos en los que ninguna de estas reglas generales es relevante. Totalmente fuera del ámbito de las acciones multitudinarias, siempre que el elemento sorpresa esté presente, hay muchos entornos en los que se puede aplicar la táctica del Bloque; de hecho, esos usos pueden ser los más prometedores para el futuro del Bloque, ahora que la policía está tan familiarizada y preparada para su presencia en las manifestaciones. Un Bloque que opere rápidamente y con el elemento sorpresa contra un objetivo desprevenido puede lograr mucho, especialmente si tiene un tamaño decente. Consulta el relato al final de este texto para ver un ejemplo de cómo se puede implementar un Bloque, fuera del formato de manifestación, para causar estragos en propiedades empresariales y gubernamentales.

Al actuar como Bloque, sin contar con una multitud que ayude a esconderse, la ventaja más importante con la que se cuenta es la del factor sorpresa. Si os organizáis de manera que las autoridades en cuestión no vean que vuestra acción se avecina, es posible que podáis hacer todo lo planeado y escapar antes de que puedan responder. Incluso cuando lleguen, es probable que no estén preparadxs para realizar arrestos masivos, por lo que podéis esperar que solo intenten capturar a individuxs aisladxs; en esta situación, las personas que llevan a cabo acciones de alto riesgo pueden desaparecer en medio de la conmoción (lxs entusiastas de la desobediencia civil podrían incluso enredar a la policía en pequeñas detenciones para facilitarlo, aunque, si estuvieran conectadxs con el Bloque, podrían correr el riesgo de ser imputadxs con cargos por conspiración)— o bien, si el grupo es capaz de actuar con un alto grado de solidaridad y audacia, manteniéndose unido y no permitiendo que la policía ponga sus manos sobre lxs individuxs que lo componen, podría negociarse una salida colectiva, aunque debéis contar con que después, mínimo, os persigan. Ya ha ocurrido en alguna ocasión anterior que, grupos de activistas que habían violado la ley juntxs, y demostrado que no se dejarían intimidar ni permitirían detener a sus miembrxs, han sido autorizadxs por policías desprevenidxs a abandonar una zona a cambio de poner fin a su acción. ¡Pero también ha sucedido que les han disparado balas de goma! Si algunxs de vosotrxs estáis planeando una actividad ilegal grave, podría ser buena idea que otrxs miembrxs de vuestro grupo utilicen una amplia variedad de tácticas menos confrontativas, para que la policía no os trate a todxs como a criminales de alto riesgo. Aseguraos siempre de que todxs en vuestro grupo, especialmente lxs que no son partidarixs de correr grandes riesgos legales, conocen de antemano cuál es el nivel más alto de posible actividad ilegal, ya que nunca se sabe si la policía optará por responsabilizar a otrxs de las acciones de aquellxs a quienes no pudieron atrapar.

Si os presentáis al amanecer en las oficinas de una empresa, podéis esperar ser prácticamente lxs únicxs allí, y tendréis que disponer de la velocidad suficiente y de inteligentes rutas de escape para conseguir vuestra libertad; pero hay otras situaciones en las que, al igual que en una manifestación, estaréis protegidxs por una multitud —incluso de una multitud que potencialmente os apoya— con la que mimetizarse. Quién sabe, un Bloque de fans deportivos, que se mezcla con la alegre multitud que celebra la victoria de su equipo de fútbol local, podría desencadenar una ola de vandalismo y saqueo anticorporativos.

Al hacer planes y establecer metas para una acción de Bloque en un contexto particular, siempre es importante revisar la historia en busca de precedentes. Si la última vez que alguien intentó algo similar a lo que estáis intentando fue un desastre, será mejor que averigüéis qué elemento nuevo podéis aportar para tener una mejor oportunidad. La historia tiende a repetirse, ¡al menos cuando no usamos nuestro ingenio para impedírselo! Familiarizaos con la historia de las acciones del Black Bloc de los últimos años; siempre que estéis considerando uniros a uno, elegir y considerar el ejemplo anterior que mejor os muestre lo que podéis esperar, teniendo en cuenta que, por supuesto, vuestrxs adversarixs han estado haciendo lo mismo, por lo que repetir una estrategia en particular es una propuesta arriesgada. Es al menos tan importante saber cuándo no realizar una acción de Bloque como saber cuándo acometer una: los intentos fallidos de actuar como Bloque, cuando no hay suficientes participantes disponibles o las condiciones no son favorables, pueden agotar una energía que estaría mejor invertida en otro lugar. Cuando golpeéis como Bloque, golpead con fuerza y de manera impresionante, luego esperad la siguiente oportunidad realista para volver a hacerlo.

Estructura

Naturalmente, el grupo de afinidad es el componente esencial de cualquier Bloque. Es imposible exagerar la importancia de participar en la actividad del Bloque como parte de un pequeño grupo capaz de valerse y tomar decisiones por sí mismo; hacer lo contrario es renunciar a la responsabilidad de uno mismo en favor del grupo, y negarle a ese grupo el beneficio de tu participación como igual. Los Bloques formados por grupos de afinidad autosuficientes pueden tomar decisiones democráticas rápidamente, pueden dividirse en grupos más pequeños igualmente efectivos, pueden manejar situaciones estresantes sin el estrés adicional de cargar con una bandada de seguidorxs confundidxs. No hace falta decir que, dentro de vuestro grupo de afinidad, debéis consensuar cuáles son los objetivos, qué nivel de riesgo es aceptable, qué tipo de seguridad es apropiada. La seguridad es especialmente importante en las actividades del Bloque, debido a la mezcla imprecisa de actividad pública e ilegal en la que puede estar involucrado; aseguraos de que todxs tengan el mismo sentido de cultura de seguridad.

Independientemente del tamaño total del Bloque, cada grupo de afinidad debe ser totalmente autosuficiente, al menos en lo que respecta a los objetivos que pretende alcanzar. Rutas de escape, recursos legales, planes de emergencia, conocimiento de la zona—cada grupo de afinidad debe tener todo esto. Un sistema de compañerxs dentro de un grupo es útil, ya que, si el grupo en sí está disperso, lxs individuxs pueden asumir la responsabilidad de la seguridad y el paradero de sus compañerxs. Se pueden asignar roles internos: por ejemplo, exploradorxs que realizan un seguimiento de la actividad y de la presencia de la policía (estxs pueden estar equipadxs con radios de mano o teléfonos móviles con los que comunicarse con el grupo principal, y pueden andar en bicicleta para una mayor velocidad y movilidad; generalmente tiene más sentido colocarlxs a una distancia de una manzana más o menos del grupo, para que puedan advertir con suficiente antelación a este y tengan una perspectiva más amplia sobre la zona), personas de comunicaciones (también con radios o teléfonos móviles, y tal vez un escáner de policía) para intercambiar información con lxs exploradorxs y otros grupos, corredorxs, para transmitir nueva información a grupos cercanos, personas experimentadas, para correlacionar y considerar la información y asumir la responsabilidad de tomar decisiones en una fracción de segundo, personas para llevar a cabo las acciones planificadas, vigías para cubrirlas, tal vez un/a abanderadx o una banda de música para mantener la moral alta y mantener la visibilidad del grupo desde la distancia, etc. Sería aconsejable que una persona con ropa distinta a la del Bloque tomara parte en él, para encargarse de tareas tales como explicar a lxs espectadorxs que no deben hacer fotografías, ya que la policía puede apoderarse de sus cámaras y usar las imágenes en un tribunal. El papel que juega el grupo de afinidad en un grupo más grande también puede ser especializado: un grupo de afinidad podría servir de explorador para un Bloque más grande, o proponerse bloquear una intersección concreta, o concentrarse en mantener una pancarta al frente de un grupo numeroso.

Un grupo de afinidad puede formar ad-hoc, por sí solo, un Bloque pequeño, pero una convergencia de grupos de afinidad puede formar un Bloque mucho más grande y poderoso. En este caso, es fundamental que se establezcan estructuras eficientes y democráticas dentro del grupo. Debería ser posible, incluso en las situaciones más tensas, que la información, las preguntas y las respuestas se comuniquen rápidamente entre lxs individuxs que forman parte de los grupos de afinidad y entre los propios grupos de afinidad. Algunxs han argumentado a favor de un modelo de Bloque más militarista, que presumiblemente operaría más como los regimientos jerárquicos que nuestrxs enemigxs lanzan contra nosotrxs, pero la fuerza misma del Bloque radica en su naturaleza descentralizada e impredecible; parece una tontería tratar de vencer a nuestrxs opresorxs en su propio juego en lugar de aprovechar nuestras propias fortalezas. Es mejor perfeccionar nuestra coordinación, que el control: somos directorxs de orquesta que preparan el escenario para la improvisación, no tácticxs militares con subalternxs y oficiales al mando.

En un bloque formado por grupos de afinidad de diferentes áreas, el grupo local tendrá inevitablemente la mayor cantidad de información sobre lo que es posible realizar y lo más normal es que, en consecuencia, sea el que más ha pensado y preparado la acción. Esto no es necesariamente un problema, siempre que lxs demás confíen en ellxs y estén lo suficientemente organizadxs ellxs mismxs como para conservar su autonomía. El grupo local debe tomar las medidas necesarias como para poder compartir con otros, de forma segura, tanta información como sea posible, así como asegurarse que no asume, sin querer, una posición de autoridad sobre el resto de grupos; un grupo local que intenta liderar una masa desinformada en una misión secreta no desvelada puede ser una verdadera receta para el desastre.

Preparación

Una de las cosas más importantes que debéis hacer antes de una acción es reconocer la zona. La mayor cantidad posible de miembrxs de cada grupo deben invertir tiempo en recorrerla, tomando cuidadosamente notas sobre posibles rutas de escape y callejones sin salida, cámaras, lugares que la policía puede tratar de proteger o donde puede concentrarse, posibles objetivos, posibles recursos (materiales para barricadas como vallas móviles, etc.), y sobre todo asegurándose que no se perderán el día en cuestión. Aquellxs que no puedan estar allí por adelantado, deberían al menos memorizar mapas. Para aquellos lugares para los que los mapas de calles no están disponibles o no son suficientes, es posible obtener mapas aéreos en Internet.

Si existe la posibilidad de que la policía os esté esperando, cercioraos de tener un sitio seguro en el que alojaros antes de la acción. Demasiadas veces, la policía ha hecho redadas en viviendas de activistas antes de que tuviera lugar una y ha arrestado a cientos de personas; haced todo lo que podáis para encontrar un lugar donde dormir y procurad que esté fuera de su radar, para que no corráis ese riesgo. Quedaos con un/a amigx de vuestrx tíx o alquilad una habitación en un YMCA. ¡No os quedéis durmiendo en vuestro coche en las calles que patrulla la policía preparándose para los disturbios del día siguiente! Si sois de fuera de la ciudad, aseguraos también de que vuestro grupo de viaje (que puede no ser el mismo que el grupo de afinidad) ha planeado una reagrupación y salida de la zona seguras, y de que tenéis un plan B en caso de emergencia. Tened en cuenta que, si las cosas realmente salen mal, es posible que ciertas partes de la ciudad se cierren después de la acción, así que tendréis que reagruparos en otro sitio.

Las asambleas previas son una parte fundamental de la preparación de la mayoría de Bloques. Nuevamente, cómo de seguras o públicas son estas reuniones dependerá de con cuántas personas (y con qué nivel de experiencia de acción directa) esperáis contar y qué grado de riesgo legal estáis dispuestxs a asumir. Si estáis tratando de organizar un bloque abierto masivo, pero en gran parte simbólico, podéis optar por hacer circular públicamente los horarios de las reuniones; si estáis organizando el núcleo de un bloque que estará abierto en la calle, pero necesita algo de preparación en privado, decid a otras personas de vuestra confianza que inviten a la reunión solo a aquellxs en quienes confían; si estáis preparando un Bloque completamente cerrado, no solo debéis revelar la hora y el lugar de la asamblea sólo a vuestrxs compañerxs de acción, sino que también debéis aseguraos de que todxs sepan que no se debe mencionar a nadie ni siquiera la mera existencia del proyecto, y que todxs deben tener una coartada preparada por si tienen que dar explicaciones a otrxs amigxs que se preguntan qué están haciendo.

El lugar en el que reunirse es un factor importante de seguridad. No debe ser un lugar que pueda ser controlado (nada de residencias privadas), ni un lugar donde podáis ser vistxs todxs juntxs (nada del parque enfrente de lugar donde se realizarán las acciones del día siguiente), no debe ser un lugar donde se os pueda ver entrando y saliendo o donde alguien pueda entrar inesperadamente: colocad a lxs exploradorxs, cerrad la puerta una vez que comience la asamblea, tened cuidado con cualquier cosa sospechosa. Nunca olvidaré salir de una asamblea de ultra-alta seguridad celebrada en el sótano de una universidad, para acabar descubriendo que mientras estábamos encerradxs, una multitud de estudiantes liberales había abarrotado la sala contigua para ver una presentación de diapositivas—sala que todxs lxs organizadorxs del Black Bloc militante del día siguiente tuvieron que atravesar totalmente avergonzadxs! ¡UPS! Los grupos pequeños pueden pasear y charlar; los grupos más grandes pueden reunirse en lugares tranquilos al aire libre (ir de excursión o acampar, si hay tiempo) o en salas privadas en edificios públicos, como salas de estudio de la biblioteca o aulas vacías. El mejor de los casos: aunque no tiene ni idea de que estáis involucradxs en la acción directa, tenéis buena relación con el anciano que regenta el café al otro lado de la ciudad y no le importa dejaros la trastienda una tarde para una fiesta privada, sin preguntas.

Una vez que todxs estéis juntxs, si lxs asistentes no se conocen ya, podéis establecer el nivel de seguridad que tenéis jugando el juego de “avales”: cada persona pone una mano sobre otra persona presente que conoce y en la que confía. Con suerte, todxs en la sala se tocarán, a través de una conexión u otra, y la reunión puede comenzar con cierto grado de confianza en el ambiente.

Si sois parte de un grupo de afinidad que participa en un bloque más grande, querréis celebrar primero vuestras propias asambleas, de modo que, cuando un representante de vuestro grupo asista a la gran asamblea, pueda presentar la información y los recursos que tenéis para ofrecer, informar sobre las metas que esperáis alcanzar, y los planes que habéis diseñado, esto teniendo en cuenta cuánto de esto creéis que podéis contar a un mayor número de personas. Si se trata de una acción masiva y se está realizando una asamblea de portavoces, debe asistir al menos una persona del Bloque o en comunicación con él; para esta persona puede ser seguro, o no, identificarse como tal, pero al menos debería estar allí para tomar nota de lo que está sucediendo. Un/a representante del Bloque podría asistir a la asamblea de portavoces presentándose como parte de un grupo de afinidad que quiere ofrecer apoyo a quienes participan en la actividad del Bloque, y así tantear el terreno o incluso conocer a otrxs interesadxs en formar parte de él.

En las reuniones entre vuestro grupo de afinidad y el Bloque, querréis establecer algún tipo de plan para el día en cuestión (estos casi nunca salen como se esperaba, pero ayudan a que todxs practiquen imaginándose la situación, y es bueno estar preparado para tener algo que hacer en caso de que todo salga bien), y una estructura que facilite al Bloque la comunicación y la toma de decisiones rápidas y democráticas, como se describió anteriormente. La estructura os permitirá ser flexibles y, por lo tanto, efectivxs, se hagan vuestros planes realidad o no. Deberíais establecer un punto de encuentro para el Bloque, planes para la dispersión y un posible momento y lugar para reagruparse, si eso fuera lo deseable en caso de que el Bloque se dividiera temprano. Compartid información legal, qué recursos estarán disponibles para lxs arrestadxs. Repasad todos los posibles escenarios, y lo que podéis esperar lxs unxs de lxs otrxs en cada uno de ellos. La psicología es importante aquí: preparaos para lo peor, pero no os desmoralicéis—estáis sopesando los posibles problemas para estar listxs para ellos, no para autoconvenceros de no actuar.

Por último—si se hablara más de un idioma entre lxs manifestantes o lxs lugareñxs, aseguraos de aprender algunas frases importantes de cada uno de ellos: “no estamos en vuestra contra, no queremos problemas con vosotrxs”, “no corras, ¡camina!” “¡Se necesita asistencia médica!”

Durante la Acción

Poco antes de la acción, independientemente de lo que suceda, es generalmente aconsejable escribir en vuestro cuerpo, con un rotulador permanente, el número de teléfono de un contacto legal, para poder estar segurxs de que estará disponible para vosotrxs en caso de arresto. Es posible que necesitéis conocer otros números de teléfono móvil y cosas así para las acciones del día: intentad aprenderlos de memoria o, en su defecto, escribidlos en vuestra piel con una tinta que, si fuera absolutamente necesario, se pueda borrar. También querréis tener suficiente dinero para comida, transporte y llamadas telefónicas, pero nada más, ya que probablemente desaparecería en caso de arresto. Quitaos los piercings que puedan romperse. No llevéis con vosotrxs vuestra libreta de direcciones, propaganda anarquista innecesaria o cualquier cosa ilegal o que sea innecesariamente incriminatoria; llevad vuestra identificación con vosotrxs si en caso de arresto deseáis ser procesadxs con vuestra “verdadera” identidad, aseguraos de no tener documentos de identificación encima si lo que planeáis es ocultársela a la policía. Llevad con vosotrxs mucha agua y alimentos de alto contenido energético; preparaos para las emergencias: si os separáis de todxs y tenéis que pasar la noche escondidxs en un contenedor de basura, no querréis pasar también hambre—pero no os carguéis con nada innecesario. Llevad con vosotrxs cualquier material de primeros auxilios que sepáis utilizar y que puedan resultaros útiles. Tened en cuenta qué asistencia médica—como médicos de campaña y clínicas—habrá en las calles, y tened un plan por si tenéis que ir a un hospital (un nombre y un número de seguridad social falsos y una coartada, si teméis encontraros allí a la policía); tened también en cuenta si habrá observadorxs legales o si los medios de comunicación estarán presentes en las calles, y si los vais a querer cerca o lejos de vosotrxs.

Estad preparadxs para la situación que se os presente. Si la policía os supera en número, os está esperando y hay reporterxs y civiles en el área, no aparezcáis con máscaras antigás y una armadura como la gente retratada en vuestras fotos favoritas de disturbios callejeros—no van a intentar golpearos y lanzaros gas, van a tratar de rodearos y arrestaros, y tendréis que ser capaces de moveros rápidamente y camuflaros bien para evitarlo.

La ropa es la única característica esencial de la táctica de Bloque, y el pilar sobre el que descansa o se fundamenta. Es posible que, antes de la acción, deseéis practicar cómo moveros y actuar libremente con vuestro equipo para el Bloque, para no tener que acostumbraros a él cuando sea demasiado tarde. La idea general de un Bloque es que no se os distinga a lxs unxs de lxs otrxs, así que aseguraos de que, sea cual sea el tema del Bloque, todxs estáis de acuerdo y vuestra propia ropa no tiene ninguna característica que la distinga. En el peor de los casos, podéis convertir una camiseta en una máscara: usad el agujero del cuello para los ojos, atad las mangas detrás de la cabeza.

Vuestra ropa debe protegeros de los peligros que esperéis, sin agobiaros innecesariamente; y debe poder adaptarse en caso de que surjan situaciones inesperadas. Las capas son la clave: si es posible, usad una capa exterior para ir hasta donde se va a desarrollar la acción del Bloque, una capa de ropa del Bloque y luego otra capa de ropa debajo de esta para cuando tengáis que escapar—sin riesgo de hipertermia, por supuesto. Lo más sensato puede ser llevar en una bolsa sellada la capa exterior de vuestro atuendo de huida, por si acaso estáis cubiertxs de pintura, gas lacrimógeno, etc. Si esperáis ataques con armas químicas, usad una capa exterior impermeable que no permita su penetración, y debajo de ella una de fibras sintéticas que no absorba químicos (el algodón lo hará). Para enfrentamientos serios, elegid una máscara de gas con lentes a prueba de roturas y filtros reemplazables sin asbesto que no oscurezcan demasiado vuestra visión; sino, podéis respirar a través de un pañuelo empapado en vinagre o zumo de lima (transportad el pañuelo en una bolsa sellada; podéis llevar una lima o dos para mantenerlo fresco) y usar gafas de natación (aquellxs que usan gafas pueden conseguirlas graduadas con receta; cuando no las estéis usando, mantenedlas en la frente, del revés, para que no se empañen). Podéis añadir una máscara de partículas debajo del pañuelo para conseguir protección adicional. He leído que los tapones para los oídos pueden ofrecer cierta protección contra las granadas aturdidoras, pero cómo se supone que unx puede saber cuándo ponérselos y cuándo quitárselos es algo que se me escapa. Si esperáis correr el riesgo de recibir golpes o disparos de proyectiles, usad algún tipo de armadura (un equipo deportivo puede ser suficiente) y espuma o relleno, y un casco de bicicleta o motocicleta.

Un Bloque que pretenda defender una zona en enfrentamientos con la policía puede decidir utilizar escudos. Estos pueden estar hechos de tapas de cubos de basura o señales de tráfico cortadas, colchonetas hinchables o cámaras de aire fuertemente reforzadas con cinta adhesiva y posiblemente una capa de lona, del buen, y pasado de moda, cartón o de plexiglás, en capas (super-pegadas) y reforzado. Suavizad los mangos con una envoltura gruesa de cinta adhesiva para que el impacto del golpe no os rompa las muñecas y proporcionad suficiente espacio en el agarre para que vuestros nudillos no reciban todo el golpe. Los escudos más grandes son mejores para protegeros contra armas de proyectiles o para funcionar como barricada móvil, mientras que los más pequeños ofrecen mayor movilidad y son más útiles en el combate cuerpo a cuerpo. Una línea de escuderxs individuales puede formar un muro de escudos, especialmente si tienen práctica en moverse juntxs; de manera alternativa, se pueden construir multi-escudos para varias personas, como los carteles de paneles de aislamiento que se mencionan a continuación. Estos últimos escudos deben ser lo suficiente articulados como para que permitan transitar por calles estrechas; tened en cuenta también que esas articulaciones son sus puntos más débiles.

Aunque parezca absurdo, sucede a menudo que, el día de la acción, lxs compañerxs que debatieron y se prepararon juntxs no pueden reconocerse en su equipo del Bloque. Para evitar esto, es posible que deseéis identificaros entre vosotrxs desde el principio, especialmente con personas de diferentes ciudades y grupos de afinidad con los que tenéis la intención de trabajar, para que sea más fácil seguir la pista a lxs demás en medio del caos.

El momento en que se forma el Bloque puede ser fundamental. Dónde y cuándo enmascararse es una cuestión difícil: si lo hacéis demasiado tarde, una vez que se os habéis unido al Bloque, corréis el riesgo de ser identificadxs; si lo hacéis demasiado pronto, antes de uniros al Bloque, corréis el riesgo de que la policía os atrape. Los pequeños grupos de enmascaradxs, que deambulan por una zona antes o después de los eventos, son los objetivos perfectos para sus enemigxs. En una gran manifestación, una de las mejores opciones es ponerse el equipo en medio de una gran multitud que aún no esté bajo mucha vigilancia, con personas alrededor en las que se confíe, y moverse entre la multitud hasta el punto de encuentro con lxs compañerxs del Bloque. El uso de capas de ropa también es importante aquí: si podéis comenzar con una capa exterior desechable que os haga parecer un/a activista civil o liberal (uno que lleva demasiada ropa para ese clima), enmascararse significará simplemente tirarla y al mismo tiempo levantarse la máscara. En una acción en la que tenéis el beneficio de la sorpresa, siempre podéis elegir un lugar seguro y tranquilo cerca de vuestro punto de reunión y enmascararos allí.

En una acción masiva, la convergencia del Bloque nunca debiera tener lugar antes de que otrxs manifestantes salgan a las calles; una vez más, la policía simplemente detendrá al Bloque si no hay ninguna multitud que le pueda ofrecer protección o actuar como testigo. No deambuléis durante mucho tiempo alrededor del punto de convergencia, sed puntuales y moveos. Puede suceder que, una vez reunido, el Bloque tenga dificultades para acceder a la zona de acción. Una de las mejores opciones en una acción masiva es hacer que el Bloque se forme en algún lugar fuera de la zona donde la presencia policial es más fuerte y después moverse hacia allí (bueno, ¡si es ahí donde realmente necesitas ir! Tal vez deberías considerar lo que podríais conseguir en la otra dirección …) como parte de un grupo mucho más grande, antes de separarse de él para actuar como Bloque. Cuando se mueva con una masa de personas que no forman parte del Bloque, este debe mantenerse cerca de ellxs y también compacto a nivel interno; de otra manera la policía puede tratar de empujar y aislar al Bloque.

Una vez juntxs, manteneos unidxs físicamente (con la obvia excepción de lxs exploradorxs, que necesitan estar más lejos): debéis mantener a la policía fuera de vuestras filas, evitar que los equipos de detención entren para atrapar individuxs aisladxs y también mantener a vuestrxs amigxs a vuestro lado en lugar de a extrañxs o posibles agentes encubiertxs. Pancartas en el frente y los lados de un grupo puede ofrecer barreras útiles para este fin (reforzadas con tuberías de PVC o, mucho mejor, si los podéis sacar de manera segura a las calles, grandes carteles hechos de tableros de aislamiento resistentes pero flexibles, con asas cortadas; estos se pueden atar o encadenar entre sí, para crear una barricada móvil articulada de tamaño completo). Recuerda, vuestra presencia física y unión constituye vuestra fuerza, vuestra disposición para repeler las cargas policiales y frustrar los intentos de arresto es vuestro permiso para marchar. Si atacáis cuando no están preparadxs para realizar arrestos masivos o atacar con armas químicas, se verán obligadxs a tratar de intimidaros identificando a personas a las que atacar o arrestar; impedídselo, defendeos y no retrocedáis.

Es posible ocultar con antelación material que puede resultar útil—un contenedor de basura se puede llenar con palos y piedras o latas de pintura. El material sensible (como proyectiles) se puede transportar a la acción oculto en títeres, que, construidos con papel maché sobre material más fuerte, pueden servir como escudos efectivos—aunque lxs pobres titiriterxs ya reciben suficiente mierda del servicio secreto sin tener que sufrir también por vuestra culpa. Tened en cuenta que llevar encima una bolsa con piedras, botellas, gasolina, etc. no será buena idea si os arrestan. No olvidéis tampoco que, con una simple herramienta, el cemento o el asfalto siempre se pueden convertir in situ en proyectiles, bajo el cemento, los adoquines, ¿o no es así como reza el viejo dicho francés?

Todxs lxs miembrxs de vuestro grupo debéis tener, durante la fase de planificación y la acción, un apodo, de un solo uso, para poder comunicaros entre vosotrxs sin revelar vuestra identidad. Aquellxs que se comunican a través de teléfonos móviles o radios portátiles deben tener en cuenta que la policía puede estar escuchando; por lo que es conveniente que quienes realizan comunicaciones aprendan algún tipo de código o, al menos, tengan en cuenta lo que no deben decirse por esa vía. Para un grupo de afinidad o Bloque también puede ser bueno aprenderse con antelación los mensajes codificados que se van a usar, para poder comunicarse abiertamente sin que nadie más lo entienda. “¡Apretaos!”, “¡Lxs cerdxs se están moviendo!”, “¡Tenemos que romper sus líneas!”, “¡Es la hora, hagámoslo!”, “¡Dividíos y reagrupaos en el punto de reunión B!” son ejemplos de los típicos mensajes que quizás queráis codificar. No uséis códigos innecesariamente, o supongáis que, si sólo decís “galleta” cada vez que os refiráis a “cóctel molotov”, estaréis protegidxs; un uso torpe del código puede, en realidad, poneros en mayor peligro, ya que las autoridades pueden afirmar que vuestros términos codificados significan cosas más serias de lo que realmente significaban. Además, no tengáis miedo de lanzar mensajes sin codificar para todxs: “¡No os asustéis, permaneced juntxs!”, “Necesitamos acercarnos y llenar este espacio aquí, ¡disminuye la velocidad!”, “¡Médico!”, “¿Quién puede verificar lo que está diciendo?”, “¡Mantén la maldita línea!”

En el fragor de la acción, es fácil que todas las estructuras que hubierais establecido en vuestro grupo de afinidad se disuelvan a medida que lxs individuxs quedan envueltxs en nuevos escenarios. No perdáis la cabeza y dejad que la mentalidad de grupo se haga cargo; aseguraos de permanecer físicamente cerca de vuestro grupo en todo momento, manteneos en comunicación con ellxs sobre lo que está sucediendo, no os distraigáis de vuestro papel. Puede ser útil tener una formación informal: podéis permanecer un par de pasos detrás de un/a compañerx en particular en todo momento, con otrx amigx siempre a vuestro lado y otrx detrás, por ejemplo. Los planes cambiarán, pero no perdáis las estructuras que os permitan cambiarlos al instante.

Que no cunda el pánico, no creáis rumores infundados. Probablemente hasta el día siguiente, no tendréis una idea clara de lo que sucedió en cualquier otro lugar durante el desarrollo de la acción, si es que alguna vez la tenéis; en medio de todo, será fácil ser sacudido por oleadas de información errónea, así que resistíos a actuar en base a las noticias que os lleguen hasta que las hayáis comprobado dos veces. No difundáis vosotrxs mismxs rumores, y no compartáis solo las conclusiones que habéis extraído basándoos en lo que habéis visto u oído; compartid lo que habéis visto u oído y dejad que ellxs también saquen sus conclusiones.

Lxs exploradorxs deben practicar, con disimulo, el uso del equipo de comunicación y, si es posible, hacerlo mientras andan en bicicleta; lxs que sean identificadxs como exploradorxs pueden contar con el acoso policial, que será más problemático porque están solxs y son fundamentales para el éxito del grupo. Deben ser particularmente rápidxs y estar alerta. Aquellxs que usan radios deben asegurarse de haber consensuado con antelación el canal que van a usar, y un canal alternativo por si hay problemas.

Las barricadas se pueden hacer con cualquier cosa, desde dispensadores de periódicos hasta contenedores en llamas, y pueden servir para frenar el avance de la policía o simplemente para detener el tráfico; si habéis explorado la zona con antelación, deberíais poder montarlas rápidamente, en medio de la confusión de la multitud. ¡Nunca bloqueéis completamente una ruta de escape que podáis necesitar! En una situación menos conflictiva, podéis hacer que a la policía le resulte más difícil seguiros en una línea organizada moviéndoos simplemente en sentido contrario por una calle de un solo sentido, siempre que todavía haya tráfico en ella. El uso ofensivo de proyectiles es algo serio — si unx es arrestadx puede ir muchos años a prisión por ello— pero puede servir para mantener a la policía a distancia para proteger un área, o provocarlxs para que usen gas lacrimógeno (que en realidad puede ser una táctica que esperaban evitar). No empecéis a lanzar proyectiles desde un grupo pequeño que pueda ser rodeado—guardadlos para enfrentamientos masivos en los que un lado de la ciudad pertenece a la policía y la otra a lxs manifestantes. Cuando los lancéis, hacedlo como parte de un grupo grande, desde el frente de la multitud, y mantened una lluvia constante en el área en disputa. Lxs que están detrás de lxs lanzadorxs pueden proporcionar más munición a través de la brigada de cubos.

Si planeáis destruir una propiedad, id equipadxs con las herramientas adecuadas. Aseguraos de estar informadxs sobre vuestros objetivos y sus debilidades o fortalezas; si os ponéis en posición y dais ese golpe, solo para descubrir que no podéis romper el cristal blindado, habréis arriesgado mucho para nada. A veces, hacer un grafitti puede ser más elocuente que unos cristales rotos: “Network TV, mantén los ojos en los problemas” en la fachada de la tienda corporativa que habéis destrozado y querrán filmar—o, por supuesto, si es posible, siempre podéis pintar los objetivos de sus cámaras! Manteneos al tanto de la cobertura que están ofreciendo las diferentes cadenas, para poder contestar de manera concisa al/a reporterx que os acusa de interferir con la libertad de expresión: “Vimos tu cobertura del foro social anoche—sabes tan bien como yo, que no te importa la libertad de expresión”.

Las armas más peligrosas, que probablemente consideréis usar en un enfrentamiento callejero, son los cócteles molotov. Comprended que, si los usáis, podéis esperar serias represalias por parte de la policía; hacedlo solo cuando tengáis detrás de vosotrxs una zona libre de policías y cerca una multitud comprensiva a la que podáis escapar sin poner innecesariamente en peligro a nadie. En el mejor de los casos, un pequeño equipo se separará de la multitud enojada, tiraréis vuestros cócteles y desapareceréis. Si es posible, tratad de dirigirlos a la propiedad, no a lxs agentes de policía. Por supuesto, con el gobierno gastando miles de dólares en el traje especial de soldado de asalto de cada agente, tirar cosas a la policía es prácticamente un crimen sin víctimas (y no me contéis esa mierda de que en las protestas de Praga contra el FMI fueron al hospital más agentes de policía que manifestantes—en primer lugar, ¿Cuántxs manifestantes creéis que se sintieron segurxs yendo a esos hospitales y, en segundo lugar, nunca habéis oído hablar de lesiones en el ataque?)—pero sería mucho mejor arrojarles bombas de pintura (que pueden estar hechas de botellas de vidrio, bombillas, adornos huecos para árboles de Navidad o bolas de cera llenas de pintura), o disparar perdigones de pintura con el tirachinas. Si les cae pintura en sus cascos y escudos transparentes, nadie estará herido, pero se quedarán ciegxs y a pesar de su cara armadura tendrán que retirarse.

Existe una gran variedad de armas policiales que pueden utilizarse contra vosotrxs: gas pimienta, gas lacrimógeno, cañones de agua, granadas aturdidoras, balas de goma, porras, caballos o vehículos. Conoced qué esperar en cada situación y estad preparadxs. A veces, la mejor defensa es realmente un buen ataque; un bloque, preparado para actuar con más rapidez y valentía de lo que esperan lxs agentes de la ley, puede inutilizar un cañón de agua antes de que sea usado contra ellxs. Los botes de gas lacrimógeno pueden ser devueltos a la policía, pero estarán extremadamente calientes cuando aterricen; si esperáis hacer esto, aseguraos de tener puestos guantes de soldar u otra protección adecuada contra el calor, y tener un brazo para lanzar y una puntería lo suficientemente buenxs como para sacarlos por completo de la zona. No los levantéis hasta que comiencen a liberar el gas—pueden explotar y heriros. Los caballos pueden rehusar acercarse a una zona donde las cosas estén en llamas; una multitud menos conflictiva puede evitar la carga de un caballo al sentarse o acostarse frente a él.

Si la multitud parece particularmente ruidosa y la policía no está preparada para realizar arrestos, se esforzará en dispersar a la multitud. Primero utilizarán gases lacrimógenos, granadas aturdidoras, cargas de caballos, balas de goma, etc., luego, cuando lo consideren seguro, entrarán lxs agentes. Probablemente lo harán en filas, cargando y retrocediendo para reagruparse y consolidar su avance antes de volver a cargar. En ese momento, para intimidar a la masa, se llevarán a cabo detenciones violentas de individuxs aisladxs, a menos que la multitud que se enfrenta a ellxs esté muy unida y protegida por barricadas o unida por brazos entrelazados. Mientras la multitud parezca inestable y atrevida, es posible que la policía mantenga la distancia; si la multitud está confusa, es pasiva o está dispersándose, pueden moverse para formar filas en medio de ella, y acelerar así el proceso. En ningún momento debéis entrar en pánico y correr; esto solo aumentaría vuestras posibilidades de meteros en problemas y de poner en peligro a otrxs en el proceso; si otrxs empiezan a correr, gritad “¡Camina, no corras!” Al mismo tiempo, seguid moviéndoos rápidamente, mantened el caos para evitar que la policía sepa dónde están sus oponentes o qué esperar; nunca dejéis que se agrupen dentro de la multitud.

Si estáis en la carretera, intentarán forzaros a subir a la acera; esto dispersa la multitud, baja la moral y os acerca un paso más a ser acorraladxs. Si os veis obligadxs a subir a la acera, podéis usar el cruce de una calle o girar hacia una calle lateral para retomar el asfalto; mientras todavía está lleno de gente, lxs portadorxs de pancartas, al igual que lxs ciclistas, pueden correr hacia adelante y bloquear el espacio que se debe recuperar. Lo mismo ocurre con otros carriles de tráfico, si están tratando de limitarlos al que habéis tomado. Si la policía no puede hacer que todxs se suban a la acera, al menos tratarán de asustar a lxs menos militantes de la multitud para que se muevan hacia ella y adopten un papel de espectador/a, y poder así concentrarse en el contingente del núcleo duro; en este caso, intentad seguir moviéndoos y circulando para que lxs “espectadorxs” puedan volver a integrarse en la masa, aunque, por supuesto, si os estáis moviendo en un bloque compacto, no querréis perder vuestra cohesión en tal situación. En un entorno urbano, es posible que un grupo organizado y alerta se mueva a pie más rápidamente incluso que lxs policías montadxs; siempre seguid moviéndoos y manteneos por delante de vuestrxs enemigxs. Las explosiones repentinas de velocidad y los cambios de dirección pueden mantenerlxs particularmente confundidxs—solo aseguraos que vuestro grupo puede realizarlas sin confundirse el mismo o dividirse. Para coordinar esta acción de manera simultánea en grupos grandes, podéis gritar una cuenta regresiva de diez a uno.

La policía puede enviar equipos de detención contra la multitud para atrapar a individuxs que considera líderes/as o peligrosxs (o que han sido observadxs cometiendo una infracción). A veces se puede ver claramente que el oficial al mando señala a una persona a la que atrapar (esto también puede ocurrir con lxs agentes que disparan balas de goma; otrx agente puede estar seleccionando los objetivos por él/ella, y al observarlo, podéis saber quién está a punto de ser atacadx). El equipo intentará rodear al objetivo, mientras mantiene abierto un pasillo de regreso a las líneas policiales. Para protegeros, vigilad de cerca los movimientos de la policía; pueden formar una línea recta perpendicular a la multitud antes de presionar hacia el interior de esta. Si sabéis quién es el objetivo, sácadlx de la zona y vestidlx con ropa diferente. Colocad vuestros cuerpos entre lxs agentes que se acercan y el objetivo; seguid moviéndoos y entorpeciendo su camino, mientras lo hacéis parecer lo más accidental posible, para no convertiros en objetivo vosotrxs mismxs. Si un grupo puede aislar y rodear a agentes que han entrado solxs en una multitud, estxs retrocederán si sienten que no tienen el control de la situación.

Otrxs pueden intentar liberar a las personas que han sido atrapadas. El momento de hacer esto es tan pronto como la policía haya atacado, y antes de que hayan regresado a sus filas. Necesitareis varias personas para romper el cerco de lxs agentes y otras para bloquear su camino. Tan pronto como vuestrx compañerx esté libre, cogedlo del brazo y desapareced de inmediato entre la multitud. El equipo probablemente intentará arrestarlx de nuevo, y ahora también serán sus objetivxs aquellxs que lx liberaron; tened en cuenta que no permitir un arresto puede conllevar cargos penales más serios que los que habría enfrentado el objetivo original, por lo que debéis arriesgaros solo si tenéis probabilidades reales de éxito o si hay demasiado en juego como para no hacerlo. Ha ocurrido antes que la policía se ha visto obligada a liberar a lxs detenidxs al ver su furgón rodeado por una multitud enfurecida, pero el furgón tiene que estar atrapado, no solo parado. Si pincháis sus neumáticos (apuntad a la pared lateral, no a la banda de rodadura) se verán obligadxs a detenerse, pero el estallido de los neumáticos puede ser ruidoso—de nuevo, no intentéis esto a menos que estéis con personas de confianza y protección a vuestro alcance.

Si la policía os detiene, tened en cuenta que incluso el más leve tipo de defensa propia puede acarrearos cargos por agresión. Si esperáis que vuestrxs compañerxs intenten liberaros, moveos continuamente para hacer más difícil el trabajo de lxs agentes que os arrestaron, o dejad vuestro cuerpo en peso muerto: esto no acarreará cargos por agresión (aunque no es inaudito tenerlos por “resistirse al arresto”) y obligará a lxs agentes a trabajar mucho más duro para poder moveros. Tened en cuenta que dejar el peso muerto puede provocar que se pongan aún más violentxs con vosotrxs. Si cada arresto que hacen les cuesta mucho tiempo y efectivos, vuestrxs amigxs estarán en una mejor posición para escapar o intentar rescataros.

Siempre existe la posibilidad de que la policía rodee totalmente a vuestro grupo y os arreste uno a uno. Si esto ocurre, tenéis problemas. La mejor defensa es mantenerse al tanto de los movimientos policiales por medio de lxs exploradorxs: pueden intentar moverse por las calles laterales para rodearos, o atraeros hacia adelante mientras envían una dotación para cortar vuestra retirada. Si os dais cuenta de que en una dirección vuestro grupo está rodeado por una delgada línea policial, podéis intentar atacar: utilizad vuestra propia primera línea, protegida con una barrera (pancartas, escudos, vallas, al menos brazos entrelazados), para empujar como una pared sólida, si es posible con un ariete en la parte delantera para dividirlxs. Una vez, un bloque rompió las líneas policiales usando una carretilla que habían cogido de una obra. Si queréis que funcione, utilizad esta táctica lo antes posible tras haber sido rodeadxs, antes de que la policía esté completamente segura de la situación y con la máxima confianza si queréis que funcione. A menudo, vuestra mejor oportunidad para escapar será todxs juntxs como un grupo cohesionado; esto también os permitirá conservar en el proceso vuestro equipo y vuestra ropa, para mantener vuestra efectividad como Bloque, aunque solo sea para escapar. Por otro lado, si sois parte de un grupo que se está moviendo hacia lo que creéis que es una trampa, es más prudente desaparecer en la acera y salir de vuestro equipo del Bloque antes que entrar en un espacio del que no podáis escapar. Si estáis atrapadxs sin remedio, aseguraos antes de ser arrestadxs, de que os habéis deshecho de todos los elementos que puedan incriminaros, de tal manera que, con suerte, no puedan asociarlos con vosotrxs.

Recordad que la policía no podrá realizar arrestos masivos a menos que tenga muchas esposas de plástico y furgones o autobuses en la zona, por lo que estos pueden ser un buen indicio de lo que podéis esperar. Lo mismo ocurre con las armas químicas; si están listxs para usar gas lacrimógeno, todxs llevarán máscaras antigás.

Pensad en cuáles serán los objetivos de la policía y cómo estos afectarán a vuestras opciones: si están tratando de asegurar la ruta de un desfile o un área vallada, es posible que podáis correr libremente por otras áreas durante algún tiempo. Si están tratando de mantener una marcha masiva bajo control, tendrán que dividir sus fuerzas para estar atentxs por si se separa parte de la marcha; esto solo será difícil para ellxs si no tienen los suficientes efectivos, por supuesto, pero en ciertas situaciones es posible que diez grupos de cincuenta sean mucho más efectivos que un grupo de quinientxs. Habrá momentos durante acontecimientos inesperados en los que estarán paralizadxs esperando órdenes; aprovechad estos, pero tened en cuenta que el hecho de que pase un período inusualmente largo sin actividad policial, puede ser sinónimo de que se guardan un as bajo la manga, como una nueva, más fuertemente armada y blindada dotación, que está concentrada en las cercanías.

En una acción, que los poderes ven venir, agentes encubiertxs pueden estar vigilándoos y es posible que también tengáis que lidiar con agentes provocadorxs. Estad atentxs a quienes os rodean, especialmente a lxs extrañxs; lxs agentes encubiertxs pueden ser fáciles de identificar (parejas de hombres grandes, con barba de dos días, bonitos relojes de pulsera y equipo de comunicaciones) o muy difíciles de identificar. Mantened a vuestrxs compañerxs al tanto de todas las personas de las que sospecháis, pero no “descubráis” a lxs agentes encubiertxs a menos que estéis absolutamente segurxs de que lo son (por ejemplo, unx de vuestrxs exploradorxs ha estado siguiendo a unx y lx ha visto charlando con sus compañerxs de trabajo), y se puede obtener algo concreto de ello. Las acusaciones infundadas entre manifestantes solo pueden hacer que la situación sea más tensa y el entorno de la manifestación menos acogedor. En cuanto a lxs agentes provocadorxs y simplemente gente estúpida, pueden estar moviéndose entre vosotrxs o cerca vuestro, destrozando tiendas de proximidad y vehículos privados; podáis probar que son policías, o aliadxs de ellxs, o no, ciertamente podéis dejarles claro que lo que están haciendo es inaceptable y tiene que terminar. No os enredéis en debates tácticos en medio de una acción, exponed simplemente vuestro punto de vista (o, en el peor de los casos, intervenid) y continuad con vuestras cosas.

Manteneos al tanto de lxs demás, además de la policía; otrxs manifestantes de inclinaciones más “liberales” o autoritarias pueden encargarse de interferir en vuestras actividades, desenmascarándoos, agrediéndoos o señalándoos a las autoridades; lo mismo ocurre con la población civil local. Nunca, nunca, respondáis a esto con violencia; alejaos o corred si es necesario. Una acción directa que se convierte en una pelea con lxs lugareñxs u otrxs activistas es desastrosa para todxs. Intentad hablar de vuestras diferencias, si se puede y merece la pena, cuando los ánimos se hayan enfriado, en un espacio seguro alejado de la acción inmediata; enviad un portavoz si es necesario, preferiblemente un/a simpatizante de fuera del Bloque. Al menos, esto puede distraer a lxs entrometidxs mientras el resto del grupo pasa a otras acciones.

Por más locas que se pongan las cosas, recordad que la policía tiene armas de fuego, y rara vez hay razón para arriesgarse a ser asesinado por una acción. Una confrontación callejera con policías mejor armadxs que vosotrxs casi siempre va a ser más un espectáculo de confrontación que una batalla sin límites a vida o muerte; no hay que avergonzarse por ello, solo es importante tenerlo en cuenta. Lo que puede hacer la policía está determinado por lo que la opinión pública opine al respecto; vosotrxs estáis limitadxs en lo que podéis hacer por algo similar, ya que cada vez que paséis a una táctica más confrontativa, la policía inmediatamente actualizará sus tácticas a un nivel más alto que el vuestro. En este sentido, las luchas callejeras, para nosotrxs, lxs radicales, son una cuestión de caballerosidad: siempre permitimos a nuestrxs oponentes elegir las armas más poderosas, para evitar que la violencia se nos vaya de las manos y, por supuesto, ¡para mostrar cuánto más nobles y valientes somos! Si los periódicos publican (como lo han hecho antes) “La violencia estalló cuando lxs activistas comenzaron a arrojar los botes de gas lacrimógeno que había disparado la policía”, todo el mundo tendrá claro lo que está sucediendo.

Tácticamente manteneos flexibles. Si os presentasteis con equipo antidisturbios para una confrontación con la policía, pero os encontráis totalmente superadxs en número y sin preparación, podéis girar en otra dirección y moveros por los barrios cercanos recogiendo basura y embelleciendo el área, eso les ofrecerá a los medios un mensaje difícil de distorsionar!

Una vez más, todo esto será muy diferente si utilizáis la táctica del Bloque fuera del contexto de una manifestación. En lugar de enfrentaros a la policía, que esperáis que sea contagioso, o al menos arriesgarte a esa posibilidad, probablemente haréis todo lo posible para evitar encontrárosla. Lxs exploradorxs, en este caso, servirán más para advertiros sobre la proximidad de la policía, que para controlar los torpes movimientos de las fuerzas policiales cercanas y, para ello, es mejor que estén situadxs en pasos elevados de autopistas o disfrazadxs fuera de una licorería, en lugar de andando en bicicleta.

Escapad: al finalizar la acción, el último desafío que os queda es salir de vuestro equipo y desaparecer. Las capas de ropa, una vez más, son la clave: debajo de vuestra ropa del Bloque, debéis usar prendas que os hagan mimetizaros fácilmente con cualquier manifestante liberal o civil que haya en el área. Es posible que tengáis que llegar a esa capa en un instante: por ejemplo, si la policía os ha señalado y os está persiguiendo. Aseguraos de que sea una transición rápida y fácil de hacer (¡aunque no una que pueda suceder accidentalmente en medio de la acción!). Tratad de hacer esto en medio de un grupo de gente distraída, o en una esquina o en un arbusto; si alguien os ve o una cámara os capta haciéndolo, todo el esfuerzo que hicisteis para enmascararos puede haber sido en vano. Con suerte, ya tenéis planeadas una o dos rutas de escape inteligentes: un callejón discreto, un espacio abierto demasiado ancho para que cualquier barricada policial lo bloquee, una valla que podéis escalar más rápido que cualquier agente de lxs cerdxs. Si podéis, igual queréis dejar una bicicleta en algún lugar cercano, de modo que, una vez que os hayáis alejado, podáis subiros a ella y moveros rápidamente; en entornos urbanos también podéis intentar coger un taxi (siempre que haya alguno a mano), o el metro (aunque en una situación grave, este puede ser cerrado, o la policía puede controlar a las personas que lo toman), o esconderos en un restaurante y, simplemente, comeros unas patatas fritas en un rincón tranquilo, con vuestro disfraz de civil, hasta que las cosas se calmen. A menos que las cosas se hayan vuelto realmente complicadas, todavía debierais estar con vuestrx compañerx, o con algunxs miembrxs de vuestro grupo de afinidad.

Por último, la regla número uno de toda acción directa: abandonad mientras tengáis ventaja. Llevad las cosas tan lejos como podáis, pero vivid para luchar otro día, a menos que esta sea realmente la Última Batalla.

Después

Después de la acción, reuníos nuevamente con vuestro grupo de afinidad a una hora y en un lugar segurxs, alejadxs del peligro y la vigilancia. Dad a todxs espacio para compartir cómo se sienten. Discutid y criticad lo que sucedió, lo que aprendisteis de ello, lo que significa para el futuro. Si corresponde, aseguraos de informar sobre vuestras conclusiones a otros grupos de afinidad y buscad también sus comentarios. Si algunx de vosotrxs ha sido arrestadx o se enfrenta a otras dificultades, como lesiones, analizad cómo manejar esta situación. Celebrad vuestros logros, ofreced apoyo emocional, jurad y planead venganza si es necesario. Aseguraos, sobre todo, que todxs lxs involucradxs sepan que son amadxs y cuentan con vuestro apoyo.

Nunca presumáis de vuestros logros con un Bloque, ni compartáis nada que otrxs no necesiten saber, especialmente si puede incriminar a alguien. Tened en cuenta que es posible que hayáis sido captadxs por cámaras y, por muy bien disfrazadxs que estuvierais, seréis identificadxs por las autoridades. En Suecia, una mañana temprano, pocos meses después de un enfrentamiento callejero con motivo de una reunión de la Unión Europea, la policía llegó a las residencias de un par de docenas de activistas que habían estado involucradxs y lxs arrestó a todxs en el mismo momento. Ese es el peor de los casos: no dejéis que os vuelva paranoicxs. Solo estad atentxs a los peligros; si estáis haciendo un montón de cosas importantes u organizándoos para ello, es posible que deseéis vivir de tal manera que para vuestrxs enemigxs sea difícil saber dónde encontraros una mañana determinada.

Algunos temas importantes que no se tratan en esta guía:

  • Solidaridad y apoyo carcelarixs
  • Tratamiento médico
  • Observadorxs legales
  • Gestión del arresto
  • Asesoramiento y apoyo

Cóctel Molotov: Martini elaborado con demasiado vermut y pocas aceitunas.

Informe

Anarquistas y miembrxs de Earth First! de mi ciudad querían atacar una empresa de biotecnología cuyos delitos no habían sido puestos en conocimiento del público (de hecho, la corporación había sobornado al gobierno de la ciudad local). Se propusieron una gran variedad de tácticas diferentes—y hubo una considerable discusión sobre cual utilizar, ¡algunxs de nosotrxs estábamos comprometidxs con la no violencia y otrxs eran salvajes militantes anarcoprimitivistas! Al ser de ciudades pequeñas, en un área no precisamente conocida por su cantidad de activistas, tuvimos que trabajar juntxs para permitir que todxs participaran en el nivel en el que se sintieran más cómodxs. La gente no violenta podía colgar una pancarta, o alguien podía destrozar la cosecha por la noche, pero ¿qué se podía hacer que nos permitiera trabajar juntxs, estar segurxs, hacer daño a esa malvada empresa y llamar la atención como nunca antes habían visto nuestras plácidas y pequeñas ciudades? ¡Qué mejor que un ‘Bloque’! ¿Quién dice que necesitamos una gran movilización o una gigantesca protesta contra la guerra para usar tales tácticas? Podemos tener la emoción y la acción de cualquier día de movilización global, cualquier día de la semana en nuestra propia ciudad. No será porque no haya más “estado” para destrozar en Washington DC, Génova o Seattle que en nuestros propios barrios. No solo eso, sino que esta vez la policía no estaría preparada para nosotrxs.

Ya que íbamos a combatir la biotecnología, tenía más sentido que nos vistiéramos con trajes de protección biológica que de negro; no solo nos camuflarían, sino que transmitirían nuestro mensaje por sí mismos. Comprados al por mayor, costaban menos de tres dólares cada uno. Los trajes carecían de mascarillas, así que hicimos un rápido viaje al hospital a por ellas. Comenzamos a difundir la noticia de la acción boca a boca entre nuestrxs amigxs, manteniendo nuestro bloque limitado solo a aquellxs en quienes confiábamos.

Personas comprometidas llegaron desde fuera de la ciudad y establecieron en una granja el ‘campamento base’ para la acción, hicieron pancartas, prepararon banderas, escribieron panfletos y comunicados de prensa. La emoción fue contagiosa: lxs titiriterxs sacaron un gigantesco títere de un granjero indígena, y otro granjero quiso excavar el jardín delantero de la empresa de biotecnología para plantar semillas orgánicas. El trabajo se dividió de manera espontánea y natural entre los equipos: medios, arte, etc. El equipo de medios hizo diferentes folletos para diferentes personas—uno para los medios corporativos, otro para lxs transeúntes, incluso uno para lxs empleadxs que trabajaban allí, para explicarles que estaba pasando. A medida que pasaba el tiempo y más y más coches llenos de gente conducían por el camino de tierra hacia la granja, supimos que el lunes por la mañana, nuestro día para atacar, iba a ser más grande de lo que esperábamos.

Habíamos elegido nuestro objetivo en completo secreto, y solo unas pocas personas sabían su nombre y ubicación. Si de alguna manera se hubiera filtrado a la empresa de biotecnología la noticia de que estábamos planeando algo, nuestra acción se habría arruinado. A diferencia de muchos Bloques en las protestas, no teníamos una horda de manifestantes que sirviera de distracción, por lo que el principal elemento a nuestro favor era la sorpresa. Les dijimos a todxs lxs demás que confiaran en nosotrxs—iba a ser un objetivo de biotecnología en algún lugar cercano—y ya lo habíamos explorado. De hecho, habíamos descubierto que todo el complejo, uno de los principales centros de investigación de una empresa de biotecnología, ¡tenía solo unxs pocxs guardas de seguridad!

Esta empresa había modificado genéticamente el maíz para incluir “semillas traidoras”, semillas modificadas para depender de sus costosos pesticidas. Lxs agricultores comprarían estas semillas baratas y luego se endeudarían comprando el pesticida, perdiendo sus tierras y sus medios de vida. ¡Esta destrucción de la agricultura pequeña e indígena y de la biodiversidad estaba provocando grandes manifestaciones en Brasil y la India, donde estos cultivos habían sido arrancados del suelo y las semillas habían sido quemadas, en público! Estas semillas estaban siendo diseñadas en esa misma calle— y nadie lo sabía. La empresa era tan presuntuosa que ni siquiera invertía mucho en materia de seguridad. Todxs estuvieron de acuerdo en que era un objetivo digno, y todxs, desde pacifistas hasta militantes, estaban de acuerdo en mantener la ubicación exacta en secreto hasta el día de la acción.

La noche anterior, repasamos un mapa que incluía fotografías aéreas (que se pueden descargar fácilmente de Internet; probad terraserver.com) y mapas detallados. No revelamos la ubicación exacta excepto al conductor de cada uno de los coches. La gente recibió una formación demasiado rápida sobre técnicas de bloqueo y no detención, y se distribuyó equipo de comunicación entre los grupos de afinidad. Esta falta de formación, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoría de lxs participantes nunca habían formado parte de un bloque, fue un gran error. Aun así, los grupos de afinidad se habían unido de forma natural durante los días previos a la acción, y todo el mundo se había unido a algún grupo de amigxs cercanxs que querían arriesgarse al mismo nivel de arresto y participar en el mismo tipo de acción. Sin ningún argumento o coerción, se habían formado grupos autónomos para una verdaderamente diversa variedad de acciones: trepar al techo del edificio y colgar pancartas, cavar en el patio delantero de la empresa de biotecnología para plantar semillas, hacer el trabajo de medios independientes, repartir panfletos a los lados de las carreteras cercanas, en las que tráfico se detendría por el espectáculo que íbamos a crear, actuar en una obra de teatro con el gigante títere del granjero indígena, actuar como enlaces policiales (un enlace policial es una persona cuyo trabajo es básicamente retrasar a la policía actuando como ‘portavoz’ del grupo) y, por supuesto, destruir la propiedad. Sorprendentemente, la previsible discusión sobre violencia vs no violencia no tuvo lugar; todxs sintieron que estaban participando en una acción colectiva en la que cada grupo y cada acción eran vitales para el éxito general de todo el proyecto; el proyecto en cuestión era humillar por completo a una empresa de biotecnología que no contaba con que nadie supiera su existencia.

Al amanecer, todxs se pusieron sus trajes, revisaron sus accesorios y se subieron a sus coches. Aparcamos en el parking de un hotel cercano y un restaurante familiar, y corrimos hacia el patio delantero del enorme complejo de biotecnología. Inmediatamente, grupos treparon al techo y colgaron pancartas; otros grupos comenzaron a hacer grafittis de “Fuck Biotechnology” y “Free the Seed” en las paredes del edificio. Se desplegaron pancartas gigantes y, en cuestión de minutos, comenzó una función sobrenatural, con grupos de personas con trajes de protección biológica y un granjero con un traje tradicional, arando cuidadosamente el cuidado césped de la empresa, y plantando semillas orgánicas, mientras se erigían imágenes gigantescas de maíz biotecnológico frente a la carretera. Lxs empleadxs de la empresa debieron pensar que uno de sus propios experimentos había salido horriblemente mal y huyeron al interior, cerrando sus puertas y mirando por las ventanas. Lxs guardas de seguridad, ampliamente superadxs en número, solo miraban boquiabiertxs. Toda esta acción era visible desde la carretera, donde más participantes entregaban nuestros panfletos y daban cuidadosas explicaciones al tráfico que pasaba, tráfico que pronto se detendría. En quince minutos, nuestra acción había paralizado por completo a una de las empresas de biotecnología más grandes del mundo y había congelado el tráfico en una de las principales carreteras de Estados Unidos. Por supuesto, fueron lxs policías lxs que realmente cerraron la carretera—tal vez por temor a que el público viera el espectáculo que se avecinaba.

Por supuesto, finalmente llegó la policía, aunque, gracias al elemento sorpresa, pudimos correr libremente por el lugar durante casi una hora. Incluso cuando llegaron lxs primerxs policías, se dieron cuenta, como lxs guardias de seguridad, de que eran superadxs en número por una gran masa de maníacxs con trajes de protección biológica. Intentaron “hablar” con nuestros enlaces policiales, quienes repetidamente les dijeron que teníamos que consultarnos entre nosotrxs sobre cualquier decisión, táctica dilatoria que nos permitió realizar más acciones, un error en retrospectiva, ya que era entonces cuando deberíamos habernos reagrupado y preparado para el inevitable asalto policial. Incluso después de que llegaran los refuerzos, lxs policías tenían miedo de actuar hasta que algunxs de lxs empresarixs salieron de la oficina y susurraron en su oído. Algunxs de lxs agentes comenzaron a intentar arrestar a la gente, comenzando por la única persona que pudieron identificar: el granjero. Desafortunadamente, todos los grupos de afinidad estaban tan absortos en llevar a cabo las acciones que habían planeado, que dejaron pasar unos preciosos segundos antes de actuar, y para entonces la policía había logrado rociar con gas pimienta a un individuo en la cara. Sin embargo, gracias al pensamiento rápido, nuestro disfraz con el traje blanco y algunas ridículamente valientes técnicas de liberación (como poner la zancadilla a lxs policías y sacar a la gente de su alcance) logramos proteger del arresto a casi todxs.

En este punto, el bloque se había convertido en un grupo muy flexible compuesto por varios grupos de afinidad, la mayoría de las personas no se encontraban siquiera físicamente cerca las unas de las otras, lo que le hacía el juego a la policía. Cuando se hizo el llamamiento para ‘formar un bloque’, pronto se hizo evidente que la mayoría de la gente no tenía ni idea de lo que estábamos hablando y no entendía que reuniéndonos como un grupo más grande podríamos mantenernos alejadxs de la policía, un problema que emanó de nuestra falta de formación previa. Aun así, cuando lxs policías aparecieron en bicicleta, lxs manifestantes saltaron ágilmente las vallas para evitarlxs, ¡lo que casi lleva a un policía a chocar con la valla! Durante unos buenos quince minutos reinó un pandemonio total, con policías persiguiendo sin éxito a lxs manifestantes y manifestantes arremolinándose fuera del alcance de la policía sin abandonar las instalaciones de la empresa. El granjero optó por dejarse arrestar de forma no violenta, mientras que la persona que había sido rociada con gas pimienta fue, finalmente, esposada después de una considerable pelea. Al final, la policía se calmó y accedió a dejarnos trasladar nuestra protesta fuera de las instalaciones. Rescatando nuestras banderas gigantes, logramos reagrupar nuestras dispersas fuerzas y huir rápidamente a nuestros coches. En total, de las cincuenta personas presentes en la acción, solo hubo tres arrestos.

Intentamos regresar a nuestro escondite secreto, solo para descubrir que la ciudad había enviado secretas tras nosotrxs. Después de un viaje rápido, escapamos de la policía y nos detuvimos en un parking de camiones. ¡Tuvimos que deshacernos de nuestros trajes de protección biológica, que todavía llevábamos puestos! Regresamos a un contenedor de basura aislado y comenzamos a arrojar dentro nuestros trajes y otras pruebas incriminatorias. Entonces, para nuestra sorpresa, notamos que un camionero nos miraba a través de sus persianas. Nos ofreció un gesto de aprobación con el pulgar y una sonrisa cómplice. ¡Nuestra victoria fue retransmitida en todas las radios CB!

Reunidxs en nuestro escondite secreto, hablamos y decidimos marchar hacia el centro y hacia la cárcel. En todas partes, la gente hablaba de nuestra acción, en los comedores y en los centros comerciales, ancianxs y mujeres jóvenes; nadie lo había visto venir, ¡y la gente entendió el mensaje! No solo eso, sino que casi todo el mundo nos apoyó: “No creo que estén poniendo eso en nuestra comida”, “están jugando con la creación de Dios”, “esa empresa solo quiere ganar dinero sin importar el coste que conlleva para la ciudad o el mundo” … Nunca antes había visto una reacción tan positiva a una acción. Cuando finalmente llegamos a la cárcel, nuestra pequeña y aburrida ciudad estaba escandalizada, ¡al igual que la empresa de biotecnología!

Un abogado acordó defender a lxs acusadxs por doscientos dólares, y recaudamos el dinero a través de conciertos benéficos en los que se tocaron todos los estilos de música, desde punk hasta bluegrass. En el juzgado, la policía admitió que, debido a que todxs usaban trajes blancos, no pudieron identificar exactamente quién hizo qué, por lo que realmente no pudieron hacer que ningún cargo se mantuviera. Al final, lxs acusadxs fueron liberadxs con la única obligación de hacer servicio comunitario y ¡la policía incluso se disculpó!

Como en cualquier acción, hubo cosas que salieron mal y cosas que salieron bien. Definitivamente, pudimos correr libremente por el lugar durante un tiempo, y podríamos haber infligido un daño mucho más grave a la empresa de biotecnología que el que logramos—a pesar de dejar fuera a algunas personas. Dada la envergadura de la acción, probablemente hubiera valido la pena. Definitivamente deberíamos haber entrenado más cómo liberar a lxs arrestadxs—los métodos que usamos, como saltar y luchar con la policía, pueden ser valientes, pero no se recomiendan. También podríamos haber utilizado un buen entrenamiento de Bloque; la gente realmente no respondió cuando gritamos “formad en Bloque” para cerrar nuestras filas. Cincuenta personas juntas definitivamente podrían haberse enfrentado a la policía, pero cuando la gente entró en pánico y comenzó a correr como individuxs solitarixs, la policía logró atraparlxs. Por último, deberíamos haber tenido un abogado preparado con antelación. Aun así, la retrospectiva siempre es más clara que la previsión, y la divulgación del uso creativo de tácticas del Bloque hizo que esta fuera una acción de la que la gente de nuestra pequeña ciudad hablará durante años, y que ha causado a la empresa de biotecnología un sufrimiento y un gasto considerables.

Hay quienes dicen que el bloque está muerto, pero está tan muerto como las ideas que lo motivan. Tratar de repetir Seattle va a fallar: esas ideas murieron después de ser empleadas, pero estaban bien y vivas en ese momento, porque eran nuevas y creativas: la policía no podía verlas venir. No penséis solo en Bloques anteriores, mirad a vuestro alrededor en busca de inspiración viva. La verdadera cuestión no es si el bloque está vivo o muerto, sino qué ideas se nos ocurren para dar el siguiente golpe al capitalismo. ¡Que el próximo golpe sea mortal!